Es posible que el futuro del logotipo estático tenga los días contados. El logo que permanece invariable desde el momento en que su autor lo crea puede quedar anticuado y ha de saber evolucionar con el paso de los años.
Muchas empresas, para solucionar esto, han ido cambiado su logo con el tiempo, adaptándose a las nuevas tendencias sociales, especialmente las que exige su público objetivo.
Un caso altamente conocido es el de empresas como IBM, Canon, Apple, Renault o Pepsi que han sabido evolucionar favorablemente y han sabido rejuvenecer su logo a manos de la cirugía de sus diseñadores.
Los componentes fijos ayudan a la marca a ser reconocible por el usuario, pero es la variabilidad lo que le permite estar viva y evolucionar. De ahí que varias empresas comienzan a crear sus logotipos dinámicos, es decir, sus propias imágenes de marca que cambian según las circunstancias o según los requerimientos de la aplicación. Uno de los primeros en dar el salto fue la MTV en 1981. Crearon un sistema en el que la ‘M’ y ‘TV’ tienen una forma y posición fijas, pero pueden ser construidas con miles de variaciones de colores, patrones, texturas, animaciones y ilustraciones.
En la actualidad el máximo exponente lo encontramos en el doodle de Google.
A pesar de las limitaciones de la identidad corporativa, nos encontramos con un infinito espacio para la libertad y la creatividad.
Pero aun hay más. El portal de alquileres vacacionales y alojamiento Airbnb ha dado un paso adelante en las nuevas tendencias en el diseño de marcas, que supone un paso mucho más allá de los logos dinámicos o las colecciones de logos. Nos encontramos ante los logos personalizables. En este caso son los propios usuarios puedan elegir el formato de logotipo que más se ajuste con su personalidad, su estilo, su gusto mediante una herramienta donde pueden cambiar el color, tonos, resplandor, variaciones, texturas e incluso añadir ilustraciones en el logo. De esta forma pueden elegir el logotipo con el que se sientan más identificados, y éste es el que aparecerá en su página de usuario.
Si bien esta revolución del logotipo está en pleno auge, las leyes de propiedad intelectual no se están adaptando lo suficientemente rápido. Una identidad dinámica es difícil de patentar, por lo que las empresas pueden tener miedo a dar el salto a una identidad corporativa que no puedan proteger bajo la actual legislación de propiedad intelectual. Tal vez no todas las empresas estén preparadas para una identidad dinámica o personalizable, pero crecen cada vez más.
¡El futuro del logotipo se mueve!